Usa los ladrillos para jugar a fingir, inventar historias divertidas y practicar sonidos de animales. Encaja cada pieza en su lugar y descubre las texturas que hay debajo.
Con colores divertidos y altos contrastes ofrece una estimulación visual que mantendrá entretenido a tu pequeño. Un juguete divertido y educativo que despierta la creatividad y apoya el aprendizaje temprano.
Edad: +12 meses